En Turrones Juan Verdú Sirvent no sólo mimamos la selección de la mejor almendra marcona del Mediterráneo español, la principal materia prima de nuestros turrones protegidos y del resto de dulces navideños de obrador. También tratamos con máximo cuidado la selección de la miel, la otra base principal de los turrones con Indicación Geográfica Protegida (IGP) Jijona (de textura blanda) y Alicante (de textura dura).
Propiedades de la miel de azahar
Ya nuestros antepasados eligieron con gran acierto la miel de azahar como la variante de miel más adecuada para elaborar nuestro turrón con denominación de origen. ¿Por qué esta miel y no otras? Porque es muy suave al paladar, tiene menos calorías que otras y tiene propiedades claramente terapéuticas.
La cocción de las mieles en las mecánicas (grandes peroles con vapor de gas que proporciona la adecuada temperatura a más de cien grados centígrados) es el primero y principal proceso para la elaboración de los turrones Jijona y Alicante. El paso inmediatamente posterior al tueste de la almendra.
Al unir el agua, el azúcar y la miel de azahar en esas mecánicas, el proceso de emulsión tras el movimiento de unas aspas mecánicas permite mezclar la miel cocida con las almendras repeladas y tostadas, lo que proporciona, junto a la clara de huevo, una fusión blanquecina de la que se extrae tanto el turrón Alicante como el Jijona (aunque en este último caso requiere de un segundo proceso aún más complejo de molienda, refinado y posterior unión de la masa en los típicos y ancestrales boixets o morteros de nuestra fábrica jijonenca).
Nuestros antepasados ya tenían claro que la miel de azahar o de naranja y limonero era la más idónea para elaborar con mimo nuestros turrones. Fundamentalmente, porque esta miel tiene un aroma y un olor muy intenso, lo cual es agradable para el consumidor de turrones. Un sabor único extraído de una auténtica joya de la naturaleza. Las abejas de la miel usan el néctar de las flores de naranjo y limonero del Levante para crear uno de los manjares más inconfundibles de la gastronomía, ya ampliamente utilizada y destacada por los árabes por sus muchas y deliciosas propiedades.
Esta variedad se distingue por su alto nivel de azúcares, lo cual le proporciona una gran densidad debido a la profunda cristalización de los mismos. Su color es blanquecino, sobre todo con las bajas temperaturas, algo que cambia cuando es sometida al proceso de cocción en nuestra fábrica de turrones artesanos de Jijona. La miel no lleva ningún conservante, pues la miel ya constituye en sí mismo un potentísimo conservante natural.
La miel de azahar no tiene nada que envidiar a superalimentos como el aloe vera. Esta variedad apícola tiene efectos antimicrobianos, antisépticos, cicatrizantes, anticancerígenos y antioxidantes sobre nuestro organismo. Su contrastado poder energético está vinculado a la presencia de minerales como zinc, calcio, magnesio, selenio, cobre, potasio o sodio. Es un claro antioxidante natural, lo que favorece la prevención del envejecimiento prematuro de nuestras células. Diversos estudios científicos también apuntan a que son muchos sus beneficios y cualidades relajantes debido a los propios principios activos integrantes de la flor de azahar. Un buen sedante frente a la pérdida de sueño y producto indicado contra la ansiedad aguda.